Relais Blu

Ya en un sentido más literal, el Relais Blu imparte asimismo clases de cocina –tres veces por semana– que culminan con una comida en una terraza con vistas a la bahía de Nápoles. Esto encaja perfectamente con la atmósfera romántica del hotel, rodeado de playas privadas y calas escondidas esperando a ser descubiertas y con vistas panorámicas de la bahía y la isla de Capri que se disfrutan también desde las habitaciones (todas ellas tienen ventanales y balcones). La decoración convence incluso a quienes consideran que el diseño contemporáneo está reñido con el romanticismo: las habitaciones son la prueba de que un espacio despejado puede derrochar encanto siempre y cuando se le dé el marco adecuado.

Si no asistes a las clases de cocina, tampoco será demasiado grave: el restaurante dirigido por el chef Roberto Allocca es conocido por la absoluta frescura de sus ingredientes. Entre las excursiones organizadas a Pompeya y las escapadas por el litoral, las opciones de ocio son inagotables. A la vuelta, no olvides rematar el día tomando una copa en la terraza mientras ves caer la tarde.

Atención: El periodo de apertura del Relais Blu es de finales de marzo a principios de noviembre.

Cómo llegar: El aeropuerto de Nápoles-Capodichino está aproximadamente a una hora y media en coche. Para venir en tren desde la estación central de Nápoles “Piazza Garibaldi”, toma el servicio de cercanías “Circumvesuviana” hasta Sorrento (1 hora). Desde aquí, toma el autobús SITA en dirección a Massa Lubrense-Marciano-Termini o, si lo prefieres, toma un taxi fuera de la estación.